martes, 5 de junio de 2012

GLORIA ÁLVAREZ - DIVA, LOCUTORA E INTELECTUAL

Gloria Álvarez Prada nació en la Ciudad de Guatemala, el 9 de marzo de 1985. Locutora, diva, intelectual. Habla español, inglés e italiano. Su programa es Mañanas de Gloria, que se transmite de lunes a viernes de 8 a 11 horas, y los sábados sale en Novatopía, a las 10 horas, y el domingo, a las 15.

A toda prisa, Gloria Álvarez sale por los pasillos de Radio Corporación Nacional (RCN) para preguntar: ¿Por qué quieren entrevistarme? La respuesta es sencilla: a sus 25 años tiene dos licenciaturas y una maestría, títulos que a su edad casi nadie puede mostrar.

Esta joven es una de las locutoras de la Nueve Cuatro Nueve (94.9 FM) y conduce Mañanas de Gloria, un programa con música de moda en inglés que se transmite de lunes a viernes, de 8 a 11 horas. “Es para mentes frescas”, dice. Durante ese espacio no se escuchan chismes o similares. “No me interesa hablar de los líos de Lindsay Lohan, sus problemas con las drogas y sus juicios. Creo que existen suficientes espacios para que la gente pierda su tiempo con la vida de otros”, comenta. En cambio, aprovecha su oportunidad para recomendar a los jóvenes libros, estudios u otras herramientas para cultivar la mente.

Recientemente, uno de sus seguidores dijo que si ella fuera una caricatura, sería Lisa Simpson, la hija mediana de la famosa familia amarilla. Lisa es estudiosa, dedicada y con hambre de conocimientos. Así es Gloria, y no es para menos: en la Universidad Francisco Marroquín se graduó de dos licenciaturas, una en ciencias políticas y la otra en relaciones internacionales; las dos las estudió a la vez y, al mismo tiempo, trabajaba. “Iba a la U de 7 a 13 horas. A las 15 estaba metida en la cabina de radio —en ese tiempo en Los 40 Principales— y salía a las 18.30. Media hora después estaba de nuevo en la U y salía a las 21.30. Y conste que no dejé de parrandear un solo fin de semana”, recuerda. Es un buen ejemplo de que cuando se quieren las cosas, si se lucha, se logran. Pese al trajín, en un semestre llegó a tener un promedio de 96 puntos en sus clases. “La mente es poderosa. Te pueden quitar todas las cosas materiales, pero lo que no pueden es lo que tienes acá”, dice, señalando su cabeza.

Finalizado ese ciclo renunció a la radio y se fue becada a la Universidad de Georgetown, en Washington. Seis meses después viajó a Bélgica para estudiar una maestría en Desarrollo Internacional. Completado aquello, estuvo a punto de regresar a Guatemala, pero surgió la oportunidad de otra beca, la cual aprovechó; en esa ocasión en la Universidad de la Sapienza, en Roma, para cursar antropología y procesos de desarrollo.

Alguna vez se sintió incomprendida, debido a su afición al estudio. De paso, manda un mensaje consolador a aquellos con mente brillante: “Los nerds no son los idiotas de la clase, sino los que de verdad comprenden cómo funciona el mundo y que luego son capaces de poner en práctica sus conocimientos para el bien de los demás y de sí mismos”.

En el futuro desea aplicar todos esos conocimientos y trabajar en algún organismo internacional, en proyectos de desarrollo. “Quiero devolver algo a la sociedad por todo lo que se me ha dado”, refiere.

Gloria es una interesante e inusual mezcla de culturas, ya que tiene raíces guatemaltecas, cubanas y húngaras. Por su aspecto físico —rubia, de tez blanca y ojos verdes—, en la calle podría pasar como extranjera; sin embargo, ella se considera muy de este país.

“Mi abuelo materno era húngaro. Él salió de su país cuando entró la Unión Soviética; no lo conocí bien, porque murió cuando yo tenía 6 años. En cambio mis abuelos paternos son cubanos disidentes. Crecí con ellos y casi todos los fines de semana comía platillos tradicionales de allá, y también era usual escuchar que Fidel Castro era el demonio. Desde pequeña me percaté de las injusticias —del socialismo—, pues te dicen cómo actuar, en qué trabajar, qué comer o qué vestir. Crecí sabiendo que había un mundo allá afuera, y no era una niña que pensaba que de la casa de la Barbie no había más”.

Esa niñez que vivió le enseñó a aceptar a toda la gente sin importar su cultura, nivel socioeconómico, forma de pensar o religión. Eso sí, deja en claro que para que exista tolerancia debe existir un respeto mutuo a la individualidad. “Interactuar con personas de diferentes estratos enriquece más tu vida”, señala.

Esta jovial chica regresó a Guatemala en el 2010. Ingresó de nuevo al planeta radial el 10 de mayo de ese año, el día de las madres, y se mantiene ahí. Los temas que trata en su programa van desde el anuncio de becas de estudio y curiosidades hasta pláticas sobre gente Emo, acuerdos de paz o conflicto armado interno. Hay de todo. "La radio es una herramienta poderosa que deseo aprovechar para informar. Quiero invitar a gente especializada a que me acompañe en la cabina”.

Mientras eso llega, Gloria sigue entretenida entre libros. Sus favoritos son los de filosofía política, desarrollo internacional o las novelas de misterio. “Mi droga es la lectura; es algo que me mantiene high, pues puedo mantenerme en los mundos que quiera”, dice. Ese es el universo de Gloria; una buena opción.

Fuente: Revista D, Prensa Libre, 23 enero 2011

3 comentarios:

  1. La felicito por su intervencion con Nacho Castillo

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    1. Es mi heroina,me identifico mucho con ella ya ha briilado y su brillo ya no se apagara, porque su brillo esta en su mente y en su espiritu.

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    2. Es mi heroina,me identifico mucho con ella ya ha briilado y su brillo ya no se apagara, porque su brillo esta en su mente y en su espiritu.

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